Ésta es una de mis escenas favoritas, de una de mis pelis favoritas.
Contiene varios elementos que hacen que pase directamente a la historia del cine:
–Jessica Lange en todo su esplendor.
–Jack Nicholson desatado.
-Una cocina.
-Y mucho deseo.
Dicen que es una de esas escenas en que en más de una ocasión los intérpretes no oían la palabra: ¡Corten! Y viéndola, no me extraña en absoluto. Como todas las grandes escenas de la historia del cine contiene una valiosa lección para la vida…
Pon un mesa en la cocina.